Nunca ha dejado de lucha, desde julio del 2004, para realizar este reto : una vuelta de pista sólo al volante de un coche.
Gracias a la empresa « Société Induct », Luc Costertmans pudo lanzarse al asalto del circuito de Ledenon. Efectuó una centena de vueltas de circuito a bordo de un vehículo civil, entre el 27 y el 30 de abril del 2009.
Es una primicia ! nunca un no-vidente había pilotado un coche sólo en un circuito automóvil.
Gracias a la tecnología embarcada ; un GPS, un ordenador, una síntesis vocal y algunos algoritmos desarrollados específicamente por ingenieros, Luc llevó el vehículo hasta los 72 km/h en línea recta.
También es un renacer para este fanático de deporte automóvil, que se quedó ciego en febrero del 2004, es la primera vez en cinco años que pudo llevar a su esposa y sus hijas en los asientos pasajeros. Sus dos hijas no pudieron contener su alegría.
Próxima etapa : conducir un coche de competición !
Quizá en el circuito mítico de Spa-Francorchamps, en Bélgica.
Continuará…