Por invitación de la FFSA, para el « Tour de Córcega » 2015, el invidente Luc Costermans tomaba la salida acompañado de su copiloto Mario Porcel.
A la vuelta de nuestro viaje por tierras corsas, quisiera empezar este resumen con unos agradecimientos...
En primer lugar, deseaba dar las gracias a mi copiloto Mario Porcel sin el cual no hubiera sido posible esta aventura. A parte de estar a mi lado, ha sido también su vehículo el que nos ha servido para el Shakedown, un Renault Mégane RS de 250 CV.
Quisiera igualmente dar las gracias a Florent Mariani, comisario de carrera, Florent nos ayudaba durante los reconocimientos, abriendo paso y solicitando a los vehículos que nos ibamos a encontrar que se apartaran a un lado de la carretera. No fue tarea fácil, ya que, por momentos, la anchura no era superior a 2,5 metros. Imagínense la cara de las personas, durante la bajada de la etapa, cuando Florent les explicaba que se iban a cruzar con un piloto ciego!
Muchas gracias también a Dylan y Florian, participando sin autorización, solo para cerrar la etapa: esto es Córcega...
Muchas gracias igualmente a Aude. Lamento sinceramente haberla privado de su hombre durante varios días. Pero la carrera es lo primero!
Una vez llegado a Córcega, el sábado anterior al Shakedown, prueba a la que estábamos invitados Mario y yo para cerrar la etapa, aproveche el tiempo para visitar a mis amigos insulares.
Durante el fin de semana y el lunes siguiente recorrí todo el golfo de Ajaccio para corresponder a las numerosas invitaciones que me llegaron.
Aprovechamos para explicar el funcionamiento de nuestro equipo, recopilar datos de reconocimientos esenciales para nuestra seguridad y atender a los amigos periodistas insulares.
El martes, la presión empezaba a aumentar. En primer lugar, almorzamos con nuestro principal esponsor, Carolina Ceccaldi, en un restaurante cerca del aeropuerto. A continuación tomamos dirección Corté para recoger nuestras identificaciones, nuestro número de carrera y los adhesivos obligatorios para el coche.
Dimos una rapida vuelta por el parque técnico, donde apenas se notaba la agitación. Los pilotos y sus coches estaban haciendo un reconocimiento en el Shakedown.
Después de varias muestras de cortesía, fuimos a la zona de operaciones. Y allí tuvimos el shock. Ninguno de los comisarios sabía de nuestra llegada, y había un montón de coches para la especial. Mario, al volante, me describía la sinuosa carretera, estrecha, incluso muy estrecha por momentos, del tipo montañoso y deteriorada en función de la inclinación de la misma.
Al caer la tarde, conocimos a Florent, quién nos prestaba servicio al volante con el fin de abrir el camino por la noche para que pudiéramos reconocer el recorrido.
Sobre las de 22 horas del martes, me instalaba como piloto para una primera ascensión. Esta fue laboriosa. Era la primera vez que Mario me copilotaba en una etapa de rally, sobre todo de noche. Después de nuestro segundo intento, nos dimos por vencidos. A pesar de los faros, y por falta de visión lejana, Mario, en varias ocasiones, me informaba de las correcciones. Esto nos obligó a suspender los reconocimientos.
El miércoles por la mañana, tuvimos que señalizar el coche con las pegatinas de la FFSA. Luego fuimos al parque de asistencia, más que nada para cumplir con el departamento de comunicaciones de la Federación y tomar varias fotos. Muchos miembros de la Comisión llegaron a nuestro encuentro y nos animaron para el día siguiente.
A las 14 horas, nuestro equipo estaba listo. Dylan cerraba la etapa al final del recorrido, a la espera de nuestra llegada. Florian hacía lo propio al inicio de la etapa, Por su parte, Florent nos abría el camino con su Citroën Saxo VTS. Tras 2 subidas, tuvimos que abandonar, la especial se convirtió en una autopista. Todo el mundo quería el hacer shakedown antes de su cierre.
Así las cosas, llevamos el equipo a visitar el parque de asistencia. Nos encontramos con Julien Maurin, Campeón de Francia de Rally en 2014, con quien hablamos durante bastante tiempo. Se unirá a nosotros en uno de nuestros próximos eventos para pilotar con los ojos vendados.
Luego le tocó el turno a Romain Dumas y nos explicó sus objetivos para este "Tour de Corse": estar más cerca de François Delecour en el campeonato R GT con su Porsche GT3. Desafortunadamente Romain se vio obligado a retirarse al segundo día.
Al caer la tarde nos invitó a Mario y a mí, Alain Penasse, Team Manager de Hundai WRC. Habían desplegado una verdadera catedral en el parque de asistencia, compuesta por siete camiones, para constituir un show room de 45 m de largo, 15 m de ancho y 8 m de altura. Una estructura muy impresionante, mucho mayor que la de Volkswagen o la de Citroen.
Jueves 1 de octubre, el día D. “Dijimos que lo íbamos a hacer, ahora tenemos que hacerlo”! Me decía Mario poco convencido en el desayuno ...
Alrededor de las 10 de la mañana fuimos, en compañía del periodista del Corse Matin, a la salida del Shakedown para presentarnos al director de la carrera y a los comisarios. Y ver con ellos, cómo planeaban nuestra salida como cierre de la etapa.
Sobre las 12 horas, después de recibir el patrocinio de un sponsor de última hora, nos fuimos por última vez al parque de asistencia situado en Corté. Teníamos una cita con France 3, que quería hacer un reportaje sobre nuestro surrealista equipo.
Aprovechamos el momento para reunirnos con mi amigo David Serieys, director del rally, que me lanzó como un reto, en junio pasado, la invitación para este Shakedown.
Intercambié algunos SMS con Michèle Mouton, Julien Ingrassia, copiloto de Sebastien Ogier, y llamé a mi amigo Philippe Jeanjean para explicarle los preparativos finales antes de lanzarme en este reto que les voy a contar paso a paso como si lo estuvieran viviendo ...
14 h 30, delante de la pantalla del crono, espero a que los comisarios me den mi hora de salida. La tensión aumenta en el coche a medida que la lluvia cae. “Salida retrasada” me dice un comisario, el competidor anterior acaba de perder su coche a 600 metros de la meta .
El rally para él ha terminado, su coche da de morros en el barranco ...
14 h 40, el comisario empieza nuestra cuenta atrás. Pongo la primera, y subo de revoluciones. La televisión está presente, debemos quedar bien. Mario, sorprendido por la salida tan fulgurante, tartamudea un poco con sus notas .... Nos acercamos a la primera horquilla, y oigo a los Comisarios gritar para animarnos. Normal, Florent es parte ....
Segunda horquilla, y ahí empieza lo bueno. Había hecho el reconocimiento sobre asfalto, y descubro que es una etapa en tierra. No es de extrañar, cuatrocientos pasajes de competidores no han dejado la carretera tan limpia como yo la encontré el día anterior... La subida es terrible, nada se parece a lo que sentí ayer. Conduzco sobre grava, barro, piedras, por no hablar de la lluvia. Nada de esto es tranquilizador. Por momentos, me pregunto si todavía sigo en la carretera. A nuestra llegada, Mario reconoce que a veces no podía ver el asfalto y que fue muy difícil para él dirigirme correctamente. Por otra parte, en algunos puntos, la niebla estaba presente, por no hablar del vaho que se instaló en el coche.
Cerca de la célula de cronometraje de la meta, a la salida de una curva, nos encontramos el competidor anterior con problemas, y lo evitamos por poco. Sorprendidos, los pilotos se tiran al barranco.
Unos cientos de metros más tarde, por fin llegamos al punto de meta, aclamados por un impresionante número de comisarios que han venido a apoyarnos para la ocasión.
Un momento mágico en el coche, Mario me dice "lo hemos conseguido!", y nos abrazamos un buen rato, sabiendo, el uno como el otro, haber hecho un trabajo excelente.
Recibimos de las manos de los comisarios el carnet número 174, que confirma nuestra hora de salida, nuestra hora de llegada y el tiempo del recorrido de la etapa. Al igual que los otros competidores, recibimos este precioso documento.
Después de tantas emociones, Mario retomó el volante para dirigirnos hasta Ajaccio donde nuestros patrocinadores nos estaban esperando para exponer el Megane RS número 174 en la plaza del Diamant, lugar donde se celebró la ceremonia de salida oficial.
Durante la sesión de firmas de los pilotos, a la que fuimos invitados, nos encontramos con Julien Ingrassia, que condujo el pasado mes de junio con los ojos vendados en Ledenon en compañía Michèle Mouton. Me presentó a Sébastien Ogier, quien me dijo que iba a venir a probar nuestra disciplina si su agenda se lo permitía, en 2016. Estuve hablando con mi compatriota belga Thierry Neuville. François Delecour me tocó en el hombro para interesarse sobre nuestro Shakedown. Me crucé también con Stéphane Sarrazins, al que invité a nuestras prácticas en Alès el próximo 30 de noviembre en compañía de sus amigos y también competidores en el Campeonato del Mundo de Resistencia, Romain Dumas y Benoit Treluyer
Mucha gente vino a felicitarnos, pidiéndonos que explicáramos el funcionamiento de nuestro equipo, al mismo tiempo que retransmitían el reportaje por France 3.
Esto ha sido una epopeya que nos marcará para siempre. Estoy muy feliz de haber experimentado esto con mi amigo Mario, que me conoció cuando todavía podía ver. Como se puede imaginar, ha sido una gran cantidad de sentimientos, un montón de emociones, pero qué alivio haber logrado este reto, sobre todo sabiendo de algunos conductores que tuvieron que abandonar muy rápidamente.
Por último, me gustaría dar las gracias al Presidente de la FFSA, Dominique Serieys y a David Serieys por su invitación; gracias al equipo de la FFSA, a saber Elvira, Valerie, Barbara, Hilary, y muchos otros. Dar las gracias por su apoyo a Ari Vatanen, Jean Pierre Nicolas, Guy Fréquelin, Michèle Mouton, y muchos otros, sin olvidar el presidente de la FIA, Jean Todt.
Un gran agradecimiento al “Relais Ceccaldi” por su generosidad, Caroline y Jerónimo, así como a “Décor 2000”, que decidió, en el último minuto, apoyarnos.
Gracias a esta epopeya, hemos recogido bastante dinero para nuestra asociación "Los invidentes y sus desternillantes cacharros", aproximadamente algo más del 10 % de nuestro presupuesto anual. Esto es muy importante para la continuidad de nuestras actividades.
Y una vez más, gracias a ti Mario por haberme aguantado durante todo esta prueba.
A continuación les indico un enlace de youtube para ver el reportaje de France 3.
A todos gracias por alentarnos con vuestros mensajes, vuestros SMS, o de viva voz. Vuestro entusiasmo nos ayudó para superar este desafío muy exigente.
Nos vemos pronto, para nuevas aventuras ....
Luc Costermans.